Medidas para la supervivencia del sector, principales logros de ALA

2020, el año más crítico para el sector

Una de las reivindicaciones permanentes de ALA desde que el tráfico aéreo se reanudó tras la finalización del primer Estado de Alarma (21 de junio) fue la rebaja de las tarifas aeroportuarias para animar la demanda de pasajeros, lo que AENA atendió parcialmente con una bonificación de la tarifa de aterrizaje condicionada al nivel de operaciones a partir de la recuperación del 20% de su operativa respecto a la de 2019, que se aplica desde el 1 de noviembre y se mantendrá hasta el 31 de marzo. Aunque desde ALA acogimos favorablemente esta reducción, solicitamos una respuesta más ambiciosa con bonificaciones en la tasa de pasajeros y seguridad con cargo a los fondos europeos.

La caída del tráfico aéreo, y en algunos casos paralización total, por esta crisis ha tenido consecuencias en el ámbito laboral. Esto nos ha llevado a defender la necesidad de extender los Expedientes de Regulación de Empleo por Fuerza Mayor de forma reiterada. El Gobierno se avino finalmente a esta ampliación, la última hasta mayo de este año.

Otra de las consecuencias más visibles de esta caída del tráfico aéreo con especial intensidad en el primer Estado de Alarma obligó a las compañías aéreas a dejar gran parte de sus aviones en tierra, sino toda su flota, con el consiguiente pago de sumas millonarias por tasa de estacionamiento, que se contabilizan en más de 7 millones al mes en España. Tras reclamar insistentemente su condonación desde el Estado de Alarma y durante el verano 2020, como se ha hecho en aeropuertos como Heathrow o Schiphol, AENA se decidió por suspenderlas temporalmente por un período de seis meses.

Otra de las líneas de acción de ALA ha ido encaminada a evitar que la salida de Reino Unido del Espacio Económico Europeo (EEE) como consecuencia del Brexit se traduzca en una elevación de precios del viaje desde los aeropuertos de la red AENA con destino a las islas británicas en cuanto pasa a considerarse tráfico internacional a efectos de tarifas de pasajero y por asistencia de catering.

En otro orden de cosas hemos hecho distintas campañas poniendo de relieve que el riesgo de transmisión del COVID-19 a bordo de un avión es mínimo y, por otro, abogando por la implementación de una solución armonizada a nivel global, cuanto menos europea, con test rápidos y asequibles, a la ida y a la vuelta, que complemente las medidas adoptadas por las compañías aéreas y que contribuyen a restaurar la confianza y recuperar la conectividad aérea.

Por otro lado, ALA ha ampliado su presencia institucional con su integración en la Mesa del Turismo y su adhesión al Pacto Mundial como respuesta a su compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), especialmente con la sostenibilidad. Además, ALA ha ganado una mayor visibilidad en su Red Social de Linkedin con un crecimiento del 1.500% en un año.